AVISO LEGAL: El blog de hoy va a ser largo... jejeje
A ver por dónde empiezo que tengo el blog un pelín atrasado, en parte por pereza y en parte por que he estado sin conexión a internet una semana. Bueno eso ya pasó ahora a lo que vamos, estas últimas semanas han sido.... estupendas.
Voy a ir por partes... a finales de marzo mi encargado ofreció un día extra a quien más ventas hiciese durante la semana (con ello me refiero a seguimiento y atención al cliente) y para no extenderme os diré que soy la ganadora de un día extra de vacaciones... bieeeeen. Tras esa intensa semana tuve 5 días de vacaciones que me sentaron de maravilla. Fueron tranquilas y relajadas, leí paseé disfruté del Dolce far niente que tanto me gusta... lo dicho volví al trabajo como una rosa.
Esos días también me sirvierón para asentarme un poco más y poco a poco ir encontrando mi sitio y sintiéndome más cómoda en London. Tengo que confesar que pasé malos ratos, y que ahora estoy encantada de estar aquí conmigo misma. A veces la teoría nos la sabemos al dedillo pero llevar esa teoría a la práctica cuesta un poco más. Soy consciente de que antes estaba un poco desconectada de mi misma y por consiguiente de todo.
No me gustaba Londres, ni su clima, ni el carácter de las personas.... ni nada; lo único que quería era volver a casa lo antes posible y ahora afortunadamente para mi todo ha cambiado. Siento que mi hogar está donde donde yo quiero que esté, lo importante es sentirme bien conmigo misma. Londres es una ciudad estupenda, llena de gente maravillosa. Trabajo con gente simpática y cariñosa. Aquí hay gente a la que aprecio y me aprecian. Los comienzos no han sido tan fáciles como había imaginado aunque lo importante es que la rueda ya ha empezado a girar y esto no hay quien lo pare :)
El pasado sábado llegué a trabajar y tras la reunión matinal cada uno se fue por su lado a sus puestos. Unos 20 minutos más tarde el encargado nos reune a todos (hasta entonces debido a las vacaciones eramos unas 5 personas ese día casi el doble) para una segunda reunión y en tono serio nos dice que tiene que comunicarnos algo muy importante. Bueno, nos quedamos todos expectantes y dice: - este mes de marzo el empleado del mes es: BECKY... tóma ya.... casi me da un vaído.... menos mal que ese día iba maquillada porque me subieron unos calores a las mejillas impresionantes.... la gente empezó a aplaudir y el encargado a dar un discurso sobre los motivos por los que lo merecía.... y venga aplausos y a mi que estas cosas me dan una vergüenza increíble no sabía dónde meterme.... Excelente en puntualidad (sí lo se, yo también me maravillo) buena disposición, siempre sonriente, eficiente en las tareas a desempeñar... etc... Me pidieron unas palabras y bueno sólo pude dar las gracias que ya digo que estas cositas aunque se agradecen me dan bastante corte...
Tomando como referencia que entré a trabajar el 22 de enero y que sin enterarme de la mitad de lo que me dicen ya soy la empleada del mes de marzo.... en cuanto domine el idioma los tengo a mis pies.... jajajaja. Ahora en serio ha sido bonito, por cierto que me sacaron foto y todo (o eso intentaron) creo que en alguna se me ve la cara sin la mano en medio, que a mi las fotos con amigos me gustan pero en plan empleada del mes... eso ya es otra cosa. Ah se me olvidaba junto con el nombramiento 50 libras para gastarme en mi uniforme, día extra, 50 libras más.... y de guinda hoy me han hecho el super test (que es mensual) y he subido la puntuación aparte de haber obtenido tres excelentes.... lo dicho... estoy que me salgo...
Es domingo pasado tuve fiesta y aproveché para hacer algo diferente. Madrugué y con la guía de London decidí salir a conocer la ciudad en la que vivo. El sábado por la noche planeé ir a Brick Lane, zona de mercado el domingo con multitud de puestos de ropa, comida, flores y plantas.
Una cosa es trazar un plan y otra cómo sale. Llegué a la salida de la estación del metro y allí (desde el principio) ya me perdí y es que esa soy yo... lo bueno que tengo es que tal y como me pierdo me encuentro... al principio estuve esforzándome en interpretar el mapa que llevaba (los callejeros no son lo mio) intenté encontrar la zona que buscaba y sólo veía puestos de ropa de baja calidad que no me interesaba ver en absoluto... cuando empecé a ofuscarme ligeramente me dije: Becky, pasa de todo. Disfruta del día y del paseo. Y así fue, paseando, como encontré el mercado de Spitafields.... aaaaahhhh. Me encantó, hice varias fotos y cuando consiga pasarlas al ordenador las pondré en el blog para que las veáis.
Nuevo intento de encontrar Brick Lane eso sí, de paseo y calma total y ya fue el éxtasis. Me encontré en el lugar en el que había estado 5 años atrás, la primera vez que vine a London de vacaciones. Al principio me costó reconocerlo porque cuando Marta nos lo enseñó a Alberto y a mi era un día entre semana y no había el bullicio y la cantidad de gente, puestos de comida y tipo mercadillo viejo (todo vale) que había entonces. Entré en uno de los bares en los que en su día estuvimos y conservaba el mismo estilo, el dibujo de la pared era otro aunque ya digo que el estilo era igual.
De colofón a tan maravillosa experiencia terminé paseando por un mercado de flores y plantas. En fin se puede decir que disfruté como una niña con botas de agua en un charco... jejeje.
Podría seguir pero el aviso decía blog largo no interminable.... jejeje. Parece ser que de momento esta ciudad tiene bastante que aportar a My life in London...
Gracias a los que habéis aguantado toooooda la chapa. Y feliz noche!
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