Hoy ha sido un día grande y no lo digo porque mi hermana se haya ido :( me refiero a que London se ha puesto sus mejores galas para despedirla.
Por la mañana ha empezado nevando como el que no quiere la cosa y en pocos minutos y cuando digo pocos son de diez a quince, ha empezado a cuajar y a cubrirse todo con un manto blanco precioso. En menos de media hora coches, carreteras, aceras e incluso el parque han quedado bajo una estampa totalmente invernal y navideña. Cuando íbamos hacía el autobús que va a la estación de metro se ha cruzado delante de nosotras un zorro... la imagen inmejorable, sobre el fondo blanco un zorrillo ha pasado hasta escabullirse entre dos coches para esconderse tras la verja de una casa. Todos han salido a saludar a Erika :)
Cuando hemos llegado a la estación de metro y mientras buscábamos el monedero para comprar un billete un chico se nos ha acercado y nos ha regalado el que tenía él porque no lo iba a usar ¡bieeeen, muchas gracias!
Tras dejar a mi hermanita en el autobús he cogido el metro de vuelta a casa y por supuesto he vuelto a regalar el billete que nos han dado ya que era para todo el día. Me he puesto a estudiar que llevaba unos días relajada y después a clase.
La clase de hoy muy bien (por los compañeros) aunque se me siguen haciendo un poco aburridas. Mis nuevos compañeros (ya que los que tenía antes no han vuelto) son mayoritariamente italianos. Y conforme pasan los días nos vamos conociendo más y haciendo más migas, Salvatore está aquí con su mujer, es de Cerdeña y ha venido un mes de vacaciones para mejorar su inglés, Doménico es bailarín de danza contemporánea y ha venido a London para mejorar profesionalmente y aprender inglés. Jovanna es de Nápoles e igualmente quiere aprender inglés y vivir aquí un tiempo. Hay otro chico que no recuerdo su nombre que dice que él no es italiano, es siciliano... en fin que por gente que conozco no será. Jovanna, me ha dicho que llame mañana a una amiga suya que estaba buscando gente para una tienda de ropa y que esta noche hablaría con ella así que espero poder decir pronto "tengo trabajo".
En el descanso me han vuelto a sacar los colores con mi pronunciación, se lo agradezco de corazón y me siento feliz porque se que tengo muy buen acento y eso es mucho ganado, lo que ocurre es que cuando me lo dicen se ponen a gesticular diciendo: "tu acento, bravisimo" llevándose las puntas de los dedos a la boca como si se las besases, en fin ya sabéis típico gesto italiano. En fin que ha sido genial. Tras el fin de la clase he vuelto a casa con Elena, otra de las italianas y hemos hablado en el metro sobre lo diferente que es el carácter latino del anglosajón, ni peor ni mejor, únicamente diferente a lo que estamos acostumbradas.
Y como estamos de non-stop, de regreso a casa he conocido a Fabrice un chico francés que alquila casas y que me ha dicho que puede ayudarme a conseguir algo más económico y en una habitación propia. Bueno, está bien conocer gente y tener opciones aunque de momento lo primero es encontrar curro, lo demás vendrá rodado.
Como veis, hay días que cojo carrerílla y no paro pero es que además de depender de las ganas y el ánimo esto es lo que hay en My life in London...
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